Aunque ya hay una segunda entrega, el filme fue un fracaso y no contó con los actores originales
Si has crecido en los años 90, probablemente haya sido una de las películas de tu adolescencia. Hace 31 años se estrenó La máscara (1994), la comedia de fantasía protagonizada por Jim Carrey y Cameron Diaz que fue un éxito de crítica y de público. Ahora, sus dos protagonistas han reconocido que están abiertos a hacer una secuela.
Diaz, que ha vuelto al cine tras once años retirada, ha reconocido que volvería como Tina Carlyle siempre que su compañero de reparto esté también involucrado en el proyecto.
«Si Jim está a bordo, quiero decir, he estado siguiendo su estela desde el primer día», ha dicho la actriz en Access Hollywood durante la promoción de De vuelta a la acción, el filme de Netflix con el que ha regresado al mundo de la interpretación tras más de una década alejada de él.
11 años después, la actriz mejor pagada regresa al cine con una película de acción en Netflix
Carrey, por su parte, dijo en diciembre de 2024 que no descartaría una secuela de La máscara si el proyecto es el adecuado. «Tiene que ser la idea correcta», dijo en CB. «Si alguien tuviera la idea correcta, supongo… Esto no va de dinero. Bromeo sobre el dinero, pero nunca se sabe. No puedes estar seguro de estas cosas».
Como añadió:
Dije que me gustaría retirarme, pero creo que estaba hablando más de un descanso porque, tan pronto como se cruza una buena idea en tu camino, o un grupo de gente con el que disfrutas trabajar y cosas así… las cosas tienden a cambiar
Una secuela sin éxito
New Line Cinema
La máscara sigue a Stanley Ipkiss, un hombre que se transforma en un superhéroe llamado La máscara cuando se coloca una misteriosa máscara verde. Chuck Russell dirigió la primera entrega, que recaudó más de 351 millones de dólares en todo el mundo con un presupuesto de 23 millones de dólares. La crítica también aprobó el filme, que es una adaptación del cómic de Mike Richardson.
El éxito de la película condujo, en 2005, a hacer una secuela. Sin embargo, ni Carrey ni Diaz volvieron como sus personajes. El hijo de la máscara, dirigida por Lawrence Guterman, fue todo lo contrario a su predecesora: un fracaso. Recaudó solo más de 59 millones de dólares en todo el mundo con un presupuesto de 84 millones de dólares. La nota de crítica que tiene en Rotten Tomatoes es un suspenso: 6%.
