El juez ha enviado a prisión a un hombre de 65 años por matar con una escopeta a su hijo de 37 años en la localidad toledana de Escalona (3.800 habitantes). Fue el propio padre quien llamó al 112 de Castilla-La Mancha a las 23.25 de este jueves para contar lo que había sucedido. El aviso provenía de un chalé ubicado en la calle Margarita, en una zona residencial del municipio.
El hombre disparó a su hijo en el abdomen durante una disputa familiar, según coinciden varias fuentes conocedoras del caso. Lo dejó malherido y muy poco después murió. Su esposa, la madre del fallecido, también se encontraba en la vivienda en el momento de los hechos.
Tras el aviso a los servicios de emergencia, acudieron a la vivienda una UVI y un equipo médico de urgencias, aunque solo pudieron confirmar el fallecimiento del hijo. Los servicios médicos tuvieron que atender a su madre, que sufrió una crisis de ansiedad.
La disputa se originó porque la víctima tenía problemas de adicción al juego y había dejado en una situación financiera comprometida a la familia, según fuentes cercanas al caso. El padre, enfermo de cáncer en un estado avanzado, terminó disparándole, añaden.
El arrestado fue detenido en el mismo lugar del suceso y trasladado a dependencias policiales, donde ha prestado declaración. La unidad de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Toledo se ha hecho cargo de la investigación. Además de los agentes de la Guardia Civil, se desplazaron hasta el lugar patrullas de la Policía Local y un equipo de asistencia psicosocial de Cruz Roja.
El padre detenido ha sido puesto este viernes a disposición judicial en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Torrijos, en funciones de guardia. Tras tomarle declaración, se ha decretado prisión provisional comunicada y sin fianza, señalan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha. Se le imputa un delito de homicidio con la agravante de parentesco de forma provisional. Esta atribución puede cambiar a lo largo de la investigación judicial, señalan las mismas fuentes.
El alcalde de la localidad, Álvaro Gutiérrez, ha considerado una “absoluta sorpresa” este trágico suceso por el que ha mostrado su consternación. “En ningún momento pudimos pensar que esto podía ocurrir (…) No hay constancia de episodios anteriores de discusiones”, ha manifestado. La familia afectada, que tiene más hijos, vive en el municipio desde hace “muchísimos años”, en una urbanización de primeras residencias, y es conocida, según Gutiérrez. “No tenemos más que condolencias para esa familia”, ha añadido.
Hace apenas tres días que ha ocurrido en la provincia de Toledo otro crimen por disputas familiares. El martes, la Guardia Civil detuvo a un hombre de 57 años por matar a su hermano de 52, en La Puebla de Almoradiel (4.487 habitantes). El agresor asestó varios golpes a su hermano con la tapa de la arqueta de un patio interior, desfigurándole el rostro, y le cortó en el cuello con un arma blanca. El detonante fue una discusión entre ambos por la adicción a las drogas que arrastraba el hermano menor. Ambos convivían con sus padres. En este caso también fue el principal implicado quien avisó que lo que había ocurrido.