La actriz y la cantante son amigas desde hace años y la eterna protagonista de Gossip Girl ha confiado en ella para afrontar el embrollo en el que se encuentra envuelta
Todavía no sé en qué lado de esta polémica posicionarme, no termino de recabar todos los datos para llegar a una conclusión. O quizás es que no quiero hacerlo, porque siempre he sido bastante fan de Blake Lively y nunca había visto bandera roja alguna en sus comportamientos. Quizás porque no las había querido ver, comportamiento bastante habitual en mí porque es algo que repito en mis relaciones afectivo-amorosas. O quizás simplemente esos detalles pasados por alto sean solo esos: malos días tenemos todos, solo que no a todos nos está mirando medio mundo cada vez que damos un paso.
Sin embargo, ¿qué es lo que más o menos se está comentado en torno a la actriz y a la llegada a los cines de la adaptación del «best-seller» de Colleen Hoover?
- Lo primero que hay que tener claro es que la autora relata en su libro los malos tratos y violencia de género que sufrió por parte de su padre durante su infancia y cómo eso la ha marcado a lo largo de los años a la hora de relacionarse con los hombres.
- Partiendo de esta base, hay que decir uno de los puntos incipientes de todo esto ha sido el supuesto estado de la relación entre Lively y Justin Baldoni, director, productor y protagonista de la película que además se hizo con los derechos de la novela en 2019. ¿Qué puedo decir aquí? Pues que no hay que ser la más lista de la clase para apreciar el hecho de que el elenco y Baldoni apenas han promocionado la cinta de forma conjunta, un proyecto que ya ha recaudado más de 200 millones de dólares.
- Por otra parte, los fanes de Romper El Círculo han sido muy críticos con Blake Lively tildándola de frívola por gestos como el comentario que hizo diciendo que durante los actos promocionales solo iba a llevar prendas de flores en un guiño a su personaje, Lily Bloom, que además cuenta con una floristería. Por gestos como este ha habido una impresión general de que Lively ha desplazado el centro de la película, la violencia de género, a un segundo plano. Algo que ha comentado la actriz en numerosas ocasiones es que para ella el personaje de Lily Bloom es mucho más que eso, pero claro, hay una fina línea que no se debería sobrepasar.
- Además, Blake Lively sacó a relucir un comentario de Baldoni. Según la actriz su compañero le preguntó por su peso, fue madre el pasado año, debido a que él tenía que levantarla en una escena y quería saber si sería capaz o no. Al parecer la intérprete lo entendió como una forma de «fatshaming». Igualmente, parece ser que ha habido discrepancias a la hora de la dirección y producción del film.
- Algo que sí que creo que ha sido todo un error es el hecho de que Lively haya aprovechado el momento del estreno de Romper El Círculo para hacerlo coincidir con el lanzamiento de su marca de productos para cuidados del cabello. Aquí la palabra frivolidad me encaja mucho más.
- ¿Y qué sucede con todo esto? Que Baldoni se ha decantado por mantener un perfil mucho más bajo y discreto respecto a todo, además de ser un constante abanderado de la lucha contra la violencia de género, temática sobre la que él ha hecho su parte promocional. ¿Blanco y en botella, no?
Dicho esto, me parece interesante señalar cómo al margen de posibles errores, más o menos intencionados, los medios se han cebado con Blake Lively de forma indiscriminada, cuando se habla mucho menos de lo que se debería de otras estrellas del firmamento hollywoodiense como Brad Pitt, acusado por Angelina Jolie de malos tratos y de esto apenas se habla.
En mitad de esta tormenta, Blake Lively, según comentan en Cinema Blend, ha recurrido a una de sus mejores amigas, Taylor Swift, para refugiarse durante estos tiempos, pero sobre todo para pedirle ayuda sobre cómo lidiar con una crisis de reputación tal, algo a lo que la cantante, que despierta sentimientos diametralmente opuestos en el público, está más que acostumbrada, por desgracia, como todo lo que ha vivido con Kanye West a lo largo de los años, su disputa contra Scotter Braun por los másteres de sus primeros álbumes o las constantes críticas a su persona por su forma de componer y cómo vive sus relaciones amorosas.