El apoyo al consumo local y la preferencia que busca brindar de mayor exposición a los productos nacionales es un tema de gran importancia en el contexto social y económico en México. Muchos emprendedores y comerciantes mexicanos, día con día, se enfrentan a diversos retos como lo son la piratería o el crimen organizado, pero lamentablemente, el famoso “malinchismo mexicano” suele ser el obstáculo más grande para el éxito de muchos proyectos.
El “malinchismo mexicano” puede entenderse como un curioso fenómeno social que se caracteriza por una preferencia a conceptos, ideas y productos extranjeros, mientras se desestima lo nacional. Esta actitud se encuentra arraigada en muchos ámbitos, incluso afectando referentes culturales de primer nivel en México como lo son el café y el chocolate.
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El caso de la desestimación a productos nacionales es una realidad en México, siendo el caso de Chocolates Rodríguez uno de los tantos ejemplos de esta problemática en el país. En el marco del pasado Café & Chocolate Fest 2024, Mario Rodríguez, chocolatero de oficio y dueño de Passion du Chocolat conversó para El Heraldo de México sobre la situación que su negocio tuvo que enfrentar.
Chocolates Rodríguez, un negocio nacional con 50 años de presencia en la Ciudad de México estuvo cerca de desaparecer debido a las bajas ventas, pero un cambio de nombre y un aumento significativo en los precios capturó el interés de los compradores, así lo explica Mario, quien atribuye este comportamiento al “malinchismo mexicano”.
«Mi abuelo empezó con Chocolates Rodríguez, sin embargo, cuando tomé el negocio hace 20 años noté que nuestro nombre inicial no funcionaba»
En México juzgamos «lo caro» como bueno
Si bien el negocio familiar de Mario tiene décadas en el sector del chocolate, elaborando sus productos con ingredientes nacionales y garantizando la calidad de los mismos, los mexicanos que visitaban la tienda de Chocolates Rodríguez no compraban estos dulces, a pesar de encontrarse en 5 pesos por pieza, un precio menor al de la competencia.
«Incluso algunos clientes nos comentaban que les daba desconfianza comprar un chocolate tan barato. Aumenté a $15 la pieza y las ventas comenzaron a subir, entonces me di cuenta que juzgamos lo caro como bueno y lo barato como malo»
Mario Rodríguez relató que la empresa tuvo que dejar atrás el apellido de la familia, apuntando por un nombre que evoca a una producción francesa, pero fue el aumento en los precios, la decisión que impulsó el crecimiento del negocio.
El éxito de productos locales en México se complica día con día
Rodríguez explica que clientes extranjeros le han comentado que la calidad y el sabor de su oferta se compara a lo que se encuentra en Europa, pero en México, tuvo que cambiar el nombre para poder salir adelante en un contexto mercadológico que parece estar más enfocado en la presunción que en el sabor.
«He recibido comentarios de extranjeros, algunos comentan que son los mejores chocolates que han probado tomando en cuenta que han viajado a diversos países, y otros que son muy baratos en comparación con los demás»
Si bien el futuro para los productos nacionales siempre ha estado en constante incertidumbre debido a múltiples factores, el propio rechazo a lo local por parte de los mexicanos es una realidad, la cual afectó a Passion du Chocolat y seguramente a cientos de emprendimientos. Aunque, vale la pena mencionar que el emprendimiento de chocolate de Mario Rodríguez, tiene planes para cambiar de nuevo el nombre a uno en español, esto en un futuro cercano.