Hace unos días se publicó un análisis realizado por el Instituto Peterson de Economía Internacional en Washington, D.C. donde se hace una revisión profunda sobre ¿qué pasaría con la economía estadounidense si fueran deportados los migrantes ilegales.
El modelo denominado Handbook of CG Modelling, escrito por los especialistas Warwick McKibbin y Peter Wilcoxen contemplan dos posibles escenarios: retirar a 1.3 millones de trabajadores como ha propuesto el candidato republicano a la presidencia, Donald Trump o de plano eliminar a los 7.5 millones de trabajadores migrantes de toda la economía de EUA.
Dicho modelo enfocado en seis sectores: energía, minería, agricultura, bienes duraderos, bienes no duraderos y servicios, refiere, en un primer acercamiento, que el retiro de trabajadores de esos sectores generaría ajustes en toda la economía, provocaría ajustes a otros países que retroalimentan a Estados Unidos e implicaría un impacto en los costos del movimiento de capital.
Deportar a todos los migrantes ilegales que de una forma u otra interfieren en el sector laboral en ese país, solo el primer año involucraría la disminución de 1% del PIB en 2025 y una caída más brusca en años subsecuentes, marcando tasas de crecimiento negativas en 2025 y 2026 con efectos a largo plazo.
Otro impacto ocurriría en el ciclo económico, ya que una vez que se retire a los trabajadores de esos sectores, los ingresos y el rendimiento del capital disminuirían al igual que la demanda, la inversión y el consumo, llevando a una desaceleración hasta 2030 cuando podría recuperarse, pero nunca al nivel previo.
La parametrización del modelo explica que, en tres años, el PIB sería 12% más bajo de lo que habría sido acumulativamente.
Estados Unidos alberga a más de 44.9 millones de inmigrantes, que representan aproximadamente el 13.7% de la población total. Pero no solo hablamos de mano de obra, muchos migrantes son fuertes impulsores del crecimiento económico, ya que, de acuerdo con un estudio ‘Los inmigrantes han creado más de la mitad de las empresas multimillonarias de EE.UU.’, esta población fundó o cofundó más del 55% de las empresas emergentes estadounidenses valoradas en mil millones de dólares conocidas como “unicornios“, creando miles de empleos e impulsando avances tecnológicos claves.
Datos de la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO) refiere que el año pasado, debido a las tendencias de la inmigración, Estados Unidos se encamina a tener 1.7 millones de personas más en su reserva de trabajadores y estima que habrá 5.2 millones más de trabajadores para 2033, generando un crecimiento de 7 billones de dólares al PIB durante la próxima década.
En abril pasado, en entrevista con la revista Time, el candidato Republicano, Donald Trump dijo que de regresar a la Casa Blanca, lanzaría una campaña sin precedentes contra la inmigración que contemplaría las deportaciones masivas que contemplaría a alrededor de 20 millones de personas.
Por su parte, Joe Biden, dirigió sus esfuerzos sobre inmigración a dos acciones: revocar la autoridad ejecutiva que utilizó Trump para prohibir la entrada de personas procedentes de países mayoritariamente musulmanes y prohibir la entrada a la mayoría de los solicitantes de asilo.
Hoy, tras la decisión de Biden de dar un paso atrás en búsqueda de la carrera presidencial la figura que ya se posiciona para sucederlo en el Partido Demócrata es la vicepresidenta Kamala Harris, quien comienza rompiendo récords de recaudación y en menos de 20 horas sumó más de 80 millones de dólares de apoyos para su incipiente campaña que se prevé, será meteórica.
Pero ¿cómo se vislumbra el escenario migrante con Harris? Apenas se dio a conocer su nominación y ONG´s y defensores de derechos de la comunidad migrante en ese país ya invitan a votar por ella y a recaudar fondos en una clara muestra de apoyo.
“Creemos en un país donde el progreso económico, político y social para todos puede ser una realidad (…) animamos a todos a votar por Harris”, dijo Unidos Us, la influyente plataforma a favor de los latinos en EU.
Por su parte, la poderosa organización, Voto Latino, informó que destinará 45 millones de dólares para campañas de movilización de votantes latinos y señaló que “Harris entiende la experiencia de los migrantes en una manera que pocos líderes en el país pueden hacerlo; representa el sueño americano”.
De acuerdo con la organización Fuerza México que conforma el Consejo Binacional de Fuerza Migrante, en las próximas semanas se buscará reunir a colectivos de mexicanos en Estados Unidos para lograr 10 millones de votos para las elecciones que se realizarán en noviembre.