La secuela de la mítica película de los ochenta solo pudo estrenarse gracias a una decisión unánime
Tim Burton ha decidido dirigir Bitelchús Bitelchús 36 años después del estreno de la primera entrega. El cineasta no estaba convencido de volver a retomar la historia del famoso bioexorcita interpretado por Michael Keaton, pero su llegada a los cines ha demostrado ser todo un acierto. La película ha recaudado más de 375 millones de dólares alrededor de todo mundo y ha permitido que el director recupere las ganas de seguir creando mundos fantásticos.
El desarrollo de Bitelchús 2 también se vio retrasado debido a que Warner Bros consideraba que el presupuesto de la cinta era demasiado alto. La compañía llegó a plantearle a Burton la posibilidad de que la película fuese estrenada directamente en streaming, pero un acuerdo económico entre el director y los protagonistas de la secuela ayudó a cambiar el rumbo de este exitoso título.
Jenna Ortega, entre los actores que ayudaron a ahorrar 48 millones de dólares
El presupuesto inicial de la película era de 147 millones de dólares, cifra que resultaba demasiado elevada para Warner Bros. El estudio quería que la película se estrenara directamente en el catálogo de Max, su servicio de streaming. Por supuesto, Burton rechazó rápidamente esta propuesta, pues está acostumbrado a que sus obras sean vistas en la gran pantalla.
Ahora bien, el director de Eduardo Manostijeras debía encontrar una solución si quería evitar el streaming. Decidió reducir los costes de la película para convencer al estudio de que su proyecto debía salir adelante, pero necesitaba ayuda de su reparto para conseguirlo. Al renunciar a parte de sus honorarios, el director y las estrellas Jenna Ortega, Keaton, Winona Ryder y Catherine O’Hara pudieron reducir el presupuesto a 99 millones de dólares.
A cambio, firmaron el llamado acuerdo «back-end», a través del cual se les promete un pequeño porcentaje de los ingresos de la cinta. No se conoce cuánto dinero han recibido por el estreno, pero Bitelchús Bitelchús ha sido todo un éxito y, si no llega a ser por la reducción de salario de sus protagonistas, no habríamos podido disfrutar de la familia Deetz de nuevo en acción.