Mantener una circulación sanguínea óptima es fundamental para una buena salud general y la prevención de enfermedades cardiovasculares. La circulación adecuada asegura que los órganos y tejidos reciban suficiente oxígeno y nutrientes, mientras elimina desechos metabólicos. Entre los métodos naturales más efectivos para mejorar la circulación se encuentran alimentos y semillas que no sustituyen los tratamientos médicos.
Existe una semilla denominada guásimo, que es una planta medicinal que sirve también para aliviar el dolor abdominal, controlar la diabetes, disminuir presión alta, combatir infecciones, reducir el azúcar en sangre, evitar la caída del cabello y prevenir algunas enfermedades cardiovasculares. Es un árbol frondoso y de la familia de las malváceas que puede alcanzar hasta 20 metros de altura, con un tronco de 30 a 60 centímetros de diámetro. El fruto es un cápsula en forma de esfera que simula tener picos por todo su cuerpo.
Beneficios del consumo de la semilla de guásimo
El guásimo, cuyo nombre científico es Guazuma ulmifolia y su consumo aporta propiedades antioxidantes, antimicrobianas y antiinflamatorias. Además, de ser analgésico, hipoglucemiante, hipotensor, antiespasmódico, uterotónico y neuroprotector. Debido a su contenido en flavonoides y compuestos fenólicos con acción antioxidante, el guásimo ayuda a bajar el colesterol total, colesterol malo (LDL) y triglicéridos en sangre, previniendo así el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, como aterosclerosis, infarto o derrame.
La forma más popular de utilizar el guásimo para mejorar la circulación sanguínea es usando sus hojas, frutos o cáscara para preparar tés caseros, sin embargo, esta planta también puede usar como extracto concentrado. En cualquiera de los casos lo ideal es que la indicación sea realizada por un naturópata, así como la dosis y la forma de uso. El té de esta planta puede prepararse fácilmente utilizando las cáscaras secas del tronco de la planta.
El extracto fluido de guásimo puede ser encontrado en las tiendas de productos naturales, siendo que las dosis deben ser indicadas por el médico o fitoterapeuta de acuerdo con la condición a ser tratada.Esta planta, cuando se consume en grandes cantidades o sin supervisión médica, podría causar algunos efectos desagradables como náuseas, vómitos y/o diarrea con moco y sangre. Siempre debes consultar a tu médico para evaluar cómo consumir estas semillas.