Uno de los primeros agradecimientos en el discurso de investidura del presidente de Argentina, Javier Milei, fue dirigido a su asesor de comunicación Santiago Caputo, un hombre que resultó clave en la carrera de Milei hacia la Casa Rosada.
Caputo estudió tres años de Ingeniería en informática en la Universidad de la Defensa Nacional, pero la dejó para ingresar en Ciencias Políticas en la Universidad de Buenos Aires. Llegó al partido La Libertad Avanza de la mano de su amigo Ramiro Marra, legislador y excandidato a jefe de Gobierno porteño. Ambos cursaban el secundario en el Colegio Belgrano, en Buenos Aires.
Lo cuerioso es que, a finales de 2023, el asesor de Milei viralizó en redes sociales un tatuaje que prometió hacerse si ganaba las elecciones presidenciales. Dicho y hecho, “Snake cumpliendo promesa y tatuándose a Parravicini”, escribió el diputado bonaerense Agustin Romo (del partido La Libertad Avanza) en su cuenta de X, antes Twitter.
El tatuaje alude a la profecía de «El Hombre Gris» una de las más conocidas de Benjamín Solari Parravicini llamado, también el Nostradamus argentino quien ya había acertado de pleno con el intento de asesinato a la vicepresidenta argentina Cristina F. Kirchner.
Lo que el tatuaje de Caputo no muestra es la leyenda psicográfica que acompaña al dibujo de El Pelón, como solía apodarse al profeta. Reza así:
«La Argentina tendrá su ‘revolución francesa’, en triunfo, puede ver sangre en las calles si no ve el instante del ‘Hombre Gris’” -escribió Parravicini junto al dibujo en 1971.
No son pocos los que vinculan la llegada de Javier Milei a la presidencia da la República Argentina con ese hombre gris de la profecía.
La profecía de Parravicini habla de un “hombre gris” que llegaría al poder para transformar Argentina
Una interpretación sobre «el hombre gris» fue adelantada antes de las elecciones por el sitio web de finanzas Argentina Bursatil donde se publicó una imagen ilustrativa con la leyenda: “Si mezclan amarillo y violeta, ¿sabén qué color da?”. El mensaje llevaba a una clara alusión de los colores que representan al PRO de Patricia Bullrich y a la Libertad Avanza de Javier Milei.
Obviamente el resultado de la combinación es justamente el color gris, por lo que rápidamente se vinculó a Milei con la profecía de Parravicinide que habla de un “hombre gris” llegará al poder para transformar al país.
Pensé que era fake, pero es 100% real.
Argentinos trabajando por un país y un mundo mejor 🫱🏼🫲🏻 pic.twitter.com/iEnusEyWNv— Ramiro Marra (@RAMIROMARRA) February 11, 2024
La predicción continúa de manera inquietante según Diario Uno: «Fuego, hambre, pestes, muerte, repite la campaña justiciera que se acerca al mundo, más aún el mundo no escucha, ni ve (contexto internacional). Viene la tiniebla del dragón que pareció dormido (China). Viene el terror del oso que fingió amor y hermandad (Rusia, Vladimir Putin). Viene el demócrata humilde, que no lo fue nunca y viene con él la pobreza (John Biden). Él sin albergue, y con ellos todas las explosiones de la disgregación».
Finalmente la profecía indica que «el hombre humilde en la Argentina se allega para gobernar. Él será de casta joven y desconocida en el ambiente, más será santo de maneras, creencias y sabiduría. ¡El llegará luego de la tercera jornada!»
El escéptico argentino Alejandro Agostinelli llega a decir que «Benjamín Solari Parravicini es junto a Conan el profeta más famoso vinculado con la cosmovisión mágico-religiosa del presidente [Milei] y sus seguidores.»
No le falta razón. Milei ha dado muestras de sentirse «el elegido». Hasta se comparó con Moisés en un par de ocasiones. Para respaldar los rumores que le vinculan con la profecía que le otorga esa aureola mística, el presidente Milei recibió el pasado mes de marzo en su despacho a la sobrina nieta de Parravicini, Marcela Podestá Costa.
Mil gracias Señor Presidente por la invitación!!
La primera vez en mi vida que puse bien el voto 🗳️@JMilei @vicky_podesta #VLLC pic.twitter.com/JsKDU1EyL0— Marcela Podestá Costa (@rodstewstew) March 14, 2024
Parravicini decía que interactuaba con ángeles, hadas y duendes y otras entidades que le dictaban sus «psicografías». Falleció en 1974 aunque los intérpretes de sus dibujos lo han convertido en una suerte de profeta in progress que amoldan a los acontecimientos de forma extraordinaria, como ocurrió con los atentados de las Torres Gemelas y hasta la renuncia del Papa Benedicto.