Miles de personas en México recurren a plataformas como Shein, Temu o AliExpress para vestir, decorar o equipar su hogar con productos a precios bajos. Pero esto podría cambiar. Los gigantes del comercio minorista enfrentan un incremento significativo en el impuesto que deben pagar: del 19% que se les aplicaba desde enero, pasarán ahora a un 33,5%. Así lo estableció un decreto publicado por la Secretaría de Hacienda en el Diario Oficial de la Federación, en el que se fija el nuevo impuesto mínimo global. Esto significa que, por cada 1.000 pesos gastados, se cobrarán automáticamente 335 pesos adicionales en concepto de impuestos.
Al anunciar el impuesto en enero, las autoridades mexicanas explicaron que con la medida se busca fortalecer la “lucha contra las prácticas abusivas”. El Gobierno obligó en ese entonces a las plataformas de comercio por internet a inscribirse en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC), así como tramitar la firma electrónica (e.firma) en el SAT, proporcionar un domicilio fiscal y designar un representante legal en el país.
La mayoría de las compras desde estas plataformas entraban a México bajo un esquema aduanero llamado “procedimiento simplificado de comercio electrónico”, diseñado para paquetes pequeños. Bajo ese esquema, las plataformas declaraban montos mínimos y pagaban una tasa global del 19 % que incluía IVA, aranceles e ISR.
¿Qué cambia ahora?
Con la modificación publicada por Hacienda, México impone un nuevo gravamen del 33,5 % a las importaciones de bajo valor provenientes de países sin tratado comercial, como China. Esto no solo sube el impuesto, sino que también busca cerrar una vía de evasión fiscal.
La medida solo aplicará a mercancías importadas por paquetería internacional desde países sin Tratado de Libre Comercio con México. Es decir, si un pedido proviene desde Estados Unidos o Canadá, el impuesto de 19% solo aplicará para importaciones por paquetería de productos con un valor mayor a 117 dólares.
Esto ocurre en medio de la espera del resultado de las negociaciones entre México y Estados Unidos por los aranceles. Esta semana, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, dijo que “Ya todo lo que México tenía que hacer está hecho. Ahora tenemos que esperar”. Estados Unidos lleva meses presionando a México para que controle el flujo de productos chinos que —aseguran desde Washington— están entrando al mercado estadounidense a través de territorio mexicano. La imposición de este nuevo impuesto, en parte, responde a esa presión.
Hasta ahora, ninguna de las grandes compañías ha emitido un comunicado oficial. Pero es probable que las empresas trasladen el impuesto al cliente final, que intenten absorber parte del costo para seguir siendo competitivas, o que opten por almacenar productos en México o Estados Unidos para reducir el impacto del nuevo gravamen. De hecho, Shein abrió su plataforma a proveedores nacionales desde 2023, Temu en 2024 y AliExpress este 2025.