En ocasiones, dijo Ida Vitale (Montevideo, 2 de noviembre de 1923), “existe la idea de que el poeta vuela, se aparta de las cosas terrenas, ¡que disparate!”.
Despojada de cualquier vanidad, honesta, vivaracha, alegre, la centenaria poeta uruguaya desmontó cualquier idea suprema que pueda endilgársele a la poesía y se sinceró sobre sus gustos y caminos con la palabra, al ofrecer la lectura de sus versos en el arranque de la VI Feria Internacional del Libro de las Universitarias y los Universitarios (FILUNI).
“Yo sentía que alguna poesía uruguaya muy famosa —voy a ser injusta—, Zorrila de San Martín me aburría mucho, era muy importante y, a mí me gustaba que la poesía fuera más a la mano”; después, un tanto arrepentida, remató entre carcajadas: “No debí nombrarlo”. Pero, a casi dos meses de cumplir 101 años, Vitale dejó claro que su trabajo ha consistido en “descubrir que la poesía podía tener su propia música, no algo que se le imponía”.
Hace dos años, la ganadora del Premio Cervantes 2019, había estado en la Monterrey, ahora, desde la UNAM celebró regresar a México:
“Cuando llego de vuelta realmente lo que uno ha hecho o no ha hecho me importa poco, me importa volver a recuperar años muy, muy, muy felices, no sólo porque me iba de un país que no estaba en muy buenas condiciones políticas sino porque llegue a descubrir una maravilla a la que me habían hecho camino, me habían acercado, ese lujo de literatura que es la literatura mexicana”.
Escapando de la dictadura uruguaya, Vitale se exilió en México de 1973 a 1984, su formación, sin embargo, se había dado desde la infancia:
“Tuve una formación formal porque en casa, que ya eran un poco antiguos —imagínense, mayores que yo—, había de todo ahí, cosas a las que ellos le daban mucha importancia, me daba cuenta por el lugar que ocupaban en la biblioteca, pero que eran cosas muy italianas y yo en aquella época no tenía mucha idea de que era aquello de Italia”.
“En casa, mi madre no era italiana sino casada con italiano, que había muerto, lo que me llegaba de Europa era de segunda, tercera mano, y tuve que descubrirlo por mí misma y ahí descubrí la poesía en realidad”, relató entre la lectura de uno y otro poema, leídos sin necesidad de lentes, entre carcajadas provocadas por sus propias ocurrencias.
Así llegó otra confesión:
“El Uruguay, como era un país pobre, se conformaba bastante con la poesía, con los poetas y con los prosistas y creo que es la oportunidad de decir que, a mí, la prosa es lo que más me importa (nuevamente risas) del mundo; me llevo más o menos bien con la poesía, pero con la prosa… siento que me plantea dificultades más que la poesía, la poesía es cosa de ritmo, de bueno, mal gusto, pero la prosa es todo”.
“Creo que todos vamos por el mundo destinados a ser un cubito de prosa que queda ahí para siempre, completando los grandes panoramas culturales que, a veces, nos superan, ¡esto es mucha prosa ya¡, ¿no?, ya me di cuenta”, dijo entre risotadas.
Del trabajo de Vitale, otro poeta, otro invitado de la FILUNI, el español Luis García Montero, había resaltado:
“La poesía para Ida es un campo de operaciones: escribe trabajando las palabras, trabajando con las palabras, porque las palabras en poesía interpretan, no ya una realidad hecha, sino una realidad en cambio, y las relaciones de esa realidad y esos cambios con la propia personalidad de cada uno de nosotros, nosotras, autores o lectores”.
Para la uruguaya, agregó Montero, “las palabras no son adorno, ella lo ha señalado muchas veces, las palabras más que un adorno son un esfuerzo de conocimiento del propio yo a la hora de apostar por sus lecturas del mundo, y por eso el lenguaje es el gran protagonista de la poesía de Ida Vitale”.
Hasta el 1 de septiembre próximo, la FILUNI se lleva a cabo en el Centro de Exposiciones y Congresos de la UNAM con la presencia de la Universidad de la República (Udelar), de Uruguay como invitada de honor. En el encuentro participan más de 180 sellos nacionales e internacionales, quienes forman parte de las 300 actividades culturales y académicas que forman parte del programa.
A DETALLE
- Durante seis días se llevan a cabo mesas, conversatorios, presentaciones editoriales, conferencias, talleres, entre otras actividades.
- Además de Ida Vitale entre los invitados destacan Cristina Rivera Garza, Andrés Neuman, Fernanda Melchor, Jorge Carrión, Fernanda Trías, Juan Pablo Villalobos
- En el encuentro participan 91 dependencias de la UNAM con más de 20 mil títulos.
FOTO: CORTESÍA FILUNI
MAAZ