George Lucas no ha dirigido una película en casi 20 años. Su último esfuerzo como director que no tuvo nada que ver con ‘Star Wars’ fue hace más de medio siglo. Para Francis Ford Coppola, un «talento desperdiciado»
Es uno de los directores más visionarios de la historia del cine y tres de sus películas están en el Top 5 de películas más taquilleras de la historia, pero James Cameron no tiene miedo a reconocer que, probablemente, pasará el resto de su vida profesional haciendo películas de Avatar. La primera secuela de la saga, Avatar: El sentido del agua, se estrenó 13 años después de la cinta original, que es la película más taquillera de la historia, pero sus deseo de hacerla se remonta muchos años atrás en el tiempo, al igual que sus planes para las siguientes secuelas, con las que pretende seguir explorando avances cinematográficos nunca vistos. Cameron ha estado completamente inmerso en la franquicia que creó durante 15 años y no vislumbra un final.
Algo similar puede decirse de George Lucas, el hombre que creó la saga de ciencia ficción por antonomasia, aunque el cineasta, que ahora tiene 80 años, no ha dirigido una película que no esté dentro del universo de Star Wars desde hace más de 50 años.
Lucas comenzó a experimentar con cortometrajes de 16 mm cuando tenía alrededor de 20 años y fue en 1971 cuando llegó a las pantallas su primer largometraje: la distopía de ciencia ficción THX 1138. A continuación llegaría su segunda película, American Graffiti (1973), su primera colaboración con el posterior actor de Han Solo, Harrison Ford y que hoy se considera un clásico cinematográfico.
Cuatro años más tarde, George Lucas realizaría la película que marcaría un antes y un después en su vida y que marcaría para siempre la historia del cine: una superproducción absoluta, de la que surgiría toda una franquicia que sigue gozando de popularidad ininterrumpida incluso cinco décadas después: Star Wars, hoy más conocida con el título Star Wars: Episodio IV – Una Nueva Esperanza.
Tras ella, también conocida a secas como La guerra de las galaxias, llegarían las dos primeras secuelas, El imperio contraataca y El Retorno del Jedi, que no dirigiría él mismo, sino Irvin Kershner y Richard Marquand, respectivamente. En ese momento, Lucas se concentró en darle un buen empujón a su productora Lucasfilm y a otros de los proyectos bajo su emblema, como la saga Indiana Jones junto con Steven Spielberg.
No fue hasta 1999 que el californiano volvió a sentarse en la silla del director y lo hizo de nuevo con Star Wars. Concretamente con Star Wars: Episodio I – La amenaza fantasma, el comienzo de la trilogía de precuelas que concluyó en 2005 con La venganza de los Sith.
¿George Lucas ha estado desperdiciando su talento durante décadas?
No hay duda de que George Lucas ha dedicado su vida por completo a Star Wars, lo que no termina de gustar a su amigo y colega Francis Ford Coppola, uno de los grandes maestros del cine.
Los dos directores se conocieron en 1968 durante el rodaje de los primeros trabajos de Coppola y, tras algunas colaboraciones, fundaron juntos la productora American Zoetrope.
La carrera de Coppola no salió según lo planeado: el cineasta tuvo que hacer frente a toda una serie de fracasos comerciales que lo llevaron al borde de la ruina financiera. Pero hasta el día de hoy, el peso pesado del nuevo Hollywood hace todo lo posible para hacer realidad sus visiones artísticas: la última de ellas Megalópolis, financiada en gran parte con su propio dinero.
Justo al contrario, Lucas no ha corrido riesgo semejante en su carrera y, de hecho, es una de las personas más ricas del mundo. Sin embargo, Coppola cree George Lucas ha tirado por la borda su talento y así lo ha comentado en varias ocasiones.
«Me gustaría que George Lucas cogiera ahora parte de su fortuna y hiciera algunas películas de arte personal, porque es un cineasta con mucho talento», dijo Coppola en una entrevista con The Hollywood Interview en 2007. «Nadie sabe de qué es realmente capaz».
George es un fabuloso cineasta de vanguardia y espero que llegue el día en que salga y se lleve tres cámaras de 16 mm. Es uno de los mayores desperdicios de talento que siga haciendo Star Wars una y otra vez. Star Wars es un logro sorprendente, pero desearía que George nos mostrara otro lado de sí mismo
No es la primera vez que Coppola hace una reflexión similar y, de hecho, en 2016 volvió a compartir su creencia: «George [Lucas] es una especie de genio, pero creo que es una pena que se haya dejado absorber tanto por esa franquicia. Espero que George no se sienta ofendido, pero la verdad es que Star Wars nos costó 10 nuevas películas de George Lucas que habrían sido maravillosas».