Estamos llegando al final de una era para Dragon Ball. No cabe duda: Akira Toriyama ya no está entre nosotros, la actriz que interpreta a Goku (Masako Nozawa) tiene ya 87 años y puede que quiera retirarse tarde o temprano, Dragon Ball Super está en pausa indefinida y uno podría creer que tras el fallecimiento del mangaka, la mayoría de proyectos iban a ser solo videojuegos o historias alternativas. Sin embargo, ante la promesa de varias bolsas de yenes, los productores de la franquicia han decidido que tenemos bolas de dragón para rato.
Nozawa, no contesta
Ahora mismo, los neófitos en el universo Toriyama no lo tienen fácil para aficionarse: entre Dragon Ball, Dragon Ball Z, Dragon Ball GT, Dragon Ball Super, Dragon Ball Kai y Dragon Ball Daima (además de otras series como Super Dragon Ball Heroes o las películas), ver desde cero la saga es un poco galimatías. Y está a punto de ponerse aún peor, porque, sin la batuta de Toriyama, en Toei pueden hacer lo que les de la real gana.
«Todavía estamos ideando varios planes, intercambiando ideas sobre muchas cosas y seguiremos avanzando», ha dicho Akio Iyoku, productor ejecutivo de Daima, dejando claro que habrá mucho más en el horizonte. También ha añadido que quiere darlo todo junto a Masako Nozawa, que sigue interpretando al personaje y está sorprendentemente en activo. Obviamente no sabemos a qué se refiere, porque de momento el único proyecto que conocemos en activo es el MOBA de Dragon Ball que aparecerá en 2025.
Dicho sea de paso, aunque no sea canon, puede que el juego Dragon Ball: Sparking! Zero nos de unas pistas del futuro de la saga, porque nos permite jugar con un Son Gohan que es capaz de vencer a Freezer en la trama de La resurrección de F y, por tanto, avanzar en un universo alternativo en el que aparece un Black Gohan que, quién sabe, puede ser el próximo enemigo a derrotar por los saiyans. Habrá que estar atentos.